miércoles, 30 de mayo de 2012

REGULARIZACIÓN DE LA PROPIEDAD INDÍGENA PARA LA CONSTITUCIÓN E INSCRIPCIÓN DE DERECHOS REALES DE USO Y GOCES







CONADI regularizó terrenos Mapuche para que 270 familias de La Araucanía puedan optar a programas de vivienda en zonas rurales

La Corporación Nacional de Desarrollo Indígena, Conadi, entregó derechos reales de uso y goce a familias mapuche con una inversión de 60 millones de pesos, gracias a este beneficio ahora podrán acceder a los programas habitacionales que ofrece el Ministerio de Vivienda y Urbanismo.

270 familias de las comunas de Victoria, Los Sauces, Ercilla, Traiguén, Lonquimay, Lumaco, Purén, Collipulli, Curacautín y Carahue llegaron hasta  dependencias de la cuarta compañía de Bomberos de Victoria para ser parte de la ceremonia de entrega de títulos de dominio gracias al apoyo financiero de la CONADI,  a través del programa de regularización de la propiedad indígena para la constitución e inscripción de derechos reales de uso y goce, según lo establecido en el artículo 17 de la Ley Indígena (19.253). 

La actividad conto con la presencia del Senador Alberto Espina, El Subdirector Nacional de Conadi Germán Riquelme,  La Gobernadora (s)  Javiera Sabugo y los Seremis de Agricultura y Vivienda entre otras  autoridades gubernamentales y comunales. 

 En la ocasión el Senador Espina quiso referirse a la importancia de esta entrega y las políticas de gobierno  hacia el mundo Mapuche “Esta  ha sido una ceremonia emocionante al ver a 27o familias de nuestros pueblos originarios recibiendo este documento es un enorme apoyo  al desarrollo de sus comunidades, lo que demuestra una  vez más las políticas de ayuda al pueblo mapuche que se ha visto representado a lo largo de estos dos años en  liceos bicentenarios, abastos de agua, mejoramiento de caminos, reparación de escuelas, por nombrar algunos”.  

  En la ocasión  las 11 comunidades presentes  se mostraron satisfechas y felices gracias a la entrega de este importante documento que les permitirá seguir los pasos para la anhelada casa propia mejorando sus condiciones de vida de forma sustancial. Ejemplo de ello es Miguelina Porma de Lonquimay quien vive la cruda realidad de la zona cordillerana de allegada  sin poder contar con  las mejores condiciones para vivir junto a su pequeña siendo esta ayuda fundamental para salir adelante “ ahora voy a poder postular para casa, esto es un gran logro y un importante avance ya que en el invierno se sufre mucho con la nieve y teniendo mi propia casa puedo proyectarme y estar en un espacio que sea mío, así que agradecida de  Conadi ya que era algo que yo esperaba hace mucho tiempo”.

Este programa debe proporcionar un título apto, respecto de un inmueble determinado, que permita la materialización de los subsidios habitacionales correspondientes a los diferentes programas habitacionales rurales, mediante la inversión presupuestaria de la CONADI considerando dar respuesta al Segundo Eje del programa de Gobierno en el sentido de “perfeccionar la entrega de tierras con énfasis en los subsidios individuales". Frente a esto el Subdirector Nacional de Conadi,  Germán Riquelme fue enfático en señalar que  “esto viene a ratificar las políticas de Gobierno a través de diversas instituciones, para poder terminar con el drama que significa no poder tener el titulo de dominio, ya que este les cambia la vida   para poder postular a todo tipo de subsidio que se encuentra en la oferta pública en este momento”.  

 Además  Riquelme destacó que “la pertinencia del beneficio del Derecho Real de Uso ya que es un programa que releva la importancia de la familia en el contexto indígena, agregándole valor a los nexos familiares los cuales son fuertes y tienen efectos importantes en varios aspectos de la vida cotidiana”.

Asimismo, se puede mencionar que son una expresión de un trabajo organizacional consolidado de las comunidades indígenas, donde los dirigentes desempeñan un rol fundamental en recoger e identificar las necesidades prioritarias, en términos de habitabilidad de las familias, lo que sin duda representa un esfuerzo no menor considerando las distancias y las dificultades propias del mundo rural.